Esta relevancia ha convertido al comedor de la casa en un espacio en donde los cálculos y detalles a la hora de su diseño lo conviertan en uno de los más estudiados sobre todo a la hora de la distribución de cada mueble o elemento en él.
Y si la comida es la principal actividad en este recinto, pues debemos tomar a la mesa de comedor como el foco central del cuarto, para a partir de ahí conseguir una perfecta repartición de todos los otros elementos que se piensan colocar en la habitación.
Al ubicar la mesa, lo recomendable es siempre situarla al centro de la habitación o algo tirada hacia uno de los lados, pero, claro está, nunca pegada a la pared –salvo que el tamaño de la habitación sea muy pequeña-, sino que debe dejar el espacio suficiente como para el acceso de los comensales.
Según el gusto y las necesidades de las familias es que el resto de los muebles y demás elementos serán colocados, pero en todo caso, hay que buscar que los aparadores para las vajillas u otros muebles puedan abrirse sin estorbar a quienes se encuentran en la mesa.
El resto del mobiliario, como modulares, otras sillas o los muebles para el televisor o el equipo de sonido, deben estar ubicados de tal manera que no interrumpan el normal tránsito entre la cocina y el comedor. Además, debe crearse un corredor natural para el ingreso de la luz y el aire fresco, sin que ningún obstáculo dificulte este propósito.
Fuente: deorailumina